El conocido como Templo de Diana es un edificio del siglo I antes de nuestra era.
Emplazado en el centro de la ciudad romana, presidía el Foro de la Colonia.
Posiblemente estuvo dedicado al culto a Roma y al emperador Augusto, como ponen de manifiesto los restos aparecidos durante las excavaciones arqueológicas. Es muy posible que fuera reutilizado en época visigoda y andalusí. Después, en el siglo XVI, los condes de los Corbos aprovecharon gran parte de esta construcción para edificar su palacio. Esta casa palaciega estuvo en uso hasta 1972, año en el que fue adquirido por el Estado Español. Actualmente, el Templo de Diana alberga un Centro de interpretación que pone de manifiesto la importancia que tuvo este edificio en época romana y su evolución hasta nuestros días.